Remontándonos en la historia vemos que  los los orígenes del FFCC vienen de antiguas vagonetas metálicas usadas en las minas para la extracción de rocas y minerales. Éstas iban tiradas por animales o personas manualmente pero el FFCC, propiamente dicho, data de mediados del 1700 con la construcción de aparatos de vía más complejos como cambios de aguja, etc, junto con locomotoras de vapor, esta gran revolución industrial se produjo principalmente en Inglaterra y en los Estados Unidos de América. En España el primer FFCC que se construyó data de 1837 en Cuba, entonces colonia Española, y en la península Ibérica en 1848 con la línea de Barcelona / Mataró de 29 Km. A partir de esa fecha se produjo una rápida expansión del FFCC por toda la Península con la construcción de numerosas líneas.

   En Castilla la Mancha se proyecta la construcción de una línea entre Alcázar y Ciudad Real pasando por Manzanares en 1852, pero ese trazado se modifica y fija un nudo ferroviario en Socuéllamos, lo que suponía la construcción de estaciones en Tomelloso y Argamasilla. Las obras llegaron a comenzar y hasta se construyó una estación en Tomelloso, cerca de donde se sitúa actualmente la "Cooperativa Almazara Virgen de las Viñas", El FFCC comenzaba a dar los primeros pasos por España y nuestros pueblos ya apostaron por él. 1855 es un año nefasto con la anulación de este trazado que finalmente fijaba el punto de enlace en Alcázar suprimiendo las estaciones de Tomelloso y Argamasilla. Ante este fatal contratiempo las autoridades locales ofrecen a la empresa constructora jornales y mano de obra para que modifiquen el trazado, sin éxito.  En 1860 llegó el FFCC a Manzanares y al año siguiente hasta C. Real. Tomelloso quedaba marginado y fuera de las dos grandes líneas férreas españolas y condenado a competir con desventaja con respecto a otras poblaciones de producción vinícola como Valdepeñas, Manzanares, etc. Este hecho hizo que apareciera el primer arranque industrial de Tomelloso que fue la destilación del vino para así reducir volúmenes y abrir puertas a nuevos mercados menos concurridos y en mejores condiciones de venta, siempre con el esfuerzo y sacrificio de los vecinos de Tomelloso.

   Pero las vías de comunicación y transporte eran necesarias con una población en auge con una producción vinícola en aumento. En 1873 se proyecta la construcción de un FFCC de vía estrecha de 1m. entre Tomelloso / Argamasilla y Herrera que finalmente quedó en nada. En 1890 el mismo Ayuntamiento ofrece una cantidad de dinero para un trazado hasta Cinco Casas a la empresa que estuviera dispuesta a construirlo pero finalmente no prosperó. En 1886 se intenta conectar a Tomelloso con una línea entre Manzanares / Requena que como las anteriores quedó en nada. En 1889 se presenta uno de los proyectos mas sólidos con la creación de una línea entre Cinco Casas / Socuéllamos y en el cual se realizan estudios y se aprueban subvenciones, (un trazado muy parecido al que se solicita hoy en día). Comprende todos los argumentos a favor del FFCC con el enlace de las generales de Levante y Andalucía.

   Al mismo tiempo se siguen proponiendo todo tipo de iniciativas por utópicas que parezcan, tal como el FFCC eléctrico de vía estrecha desde Cinco Casas hasta Tomelloso en 1898 por D. Enrique López, que lo propuso al Ayuntamiento. Cabe recordar que hasta 1911 no se inauguró el primer FFCC electrificado en España. Este hecho es todo un despliegue de agudeza, necesidad y de carácter pionero. La lista de intentos sigue, cuando en 1904 la actividad en torno al FFCC aumenta con la opción entre Cinco Casas / Socuéllamos y todo ello gracias al empuje del periódico local que fundó D. Francisco Martínez Ramírez “el Obrero de Tomelloso”. También ese mismo año se presupuesta una partida para construir una línea hasta Alcázar, dentro del proyecto Alcázar / Infantes.

   Ninguna de estas opciones terminó por materializarse, no hasta la aparición de la persona que fue capaz de conjugar todos los elementos para dotar a Tomelloso de FFCC, y no fue otro que D. Francisco Martínez Ramírez que llegó a un acuerdo con la compañía MZA para la construcción del ramal Cinco Casas / Tomelloso y que tuvo informe favorable por el Presidente de MZA en la Conferencia Internacional de París en 1908. Un ramal que se inauguró en 1914, que en 1941 pasó a formar parte de RENFE con momentos de esplendor y que su final ya es sobradamente conocido por todos con el cierre por completo en el año 1985 y su desmantelamiento en los 90.